Transporte público obtiene nota roja en materia de accesibilidad.
Al igual que los demás habitantes, la población de personas con capacidades diferentes posee derechos, los mismos derechos que posee todo ser humano, en tanto… El hecho de que una persona no pueda ver, sea no oyente o no pueda caminar y requiera movilizarse en una silla de ruedas, en ningún momento debe significar una condena automática a no soñar, a no poder ejercer plenamente una amplia cantidad de derechos, tales como: Derecho a la salud, derecho a la educación, derecho a la diversión, derecho al libre tránsito, derecho al transporte, etc, etc.
Sin embargo, en diversas ocasiones este colectivo ha sido víctima de la violación de uno o varios de sus derechos, violaciones que se hace todo un esfuerzo por erradicarlas, a decir verdad, frenar lo que debe calificarse como discriminación, constituye desafortunadamente una titánica tarea, si, una titánica tarea, debido a la desinformación que padece la sociedad, desinformación que ha llevado a la gente a tener un concepto pesimista respecto a la población con capacidades diferentes, de ahí que erróneamente se consideren las capacidades diferentes o especiales como un obstáculo para salir adelante, es ahí donde nace la discriminación, la cual se transforma en violación a los derechos, mas…
Aunque resulte difícil revertir la situación, no hay razón que justifique el abandono de la lucha en pro de lograr ese objetivo, o al menos si no se logra en un 100%, lograr una notoria mejoría.
En este caso la preocupación es la violación del derecho al transporte, producto de la ausencia de las adaptaciones requeridas en las unidades de las distintas modalidades de transporte público, llámese taxi, auto bus, etc. Resulta contradictorio, incomprensible e inexplicable que: En Costa Rica, existiendo una ley cuyo fin es defender los derechos de quienes presentan capacidades especiales, el transporte público no cumple con las rampas y las demás adaptaciones que se requieren y que , cuando mucho el 1% de taxis y de buses lo cumplen.
Pero esto no es todo, sumado a que tan solo el 1% de vehículos de transporte público cumple con las rampas y el resto de adaptaciones, es ese mismo porcentaje de choferes, el que está dispuesto a brindar el servicio, el resto se dedica a inventar excusas para evadir la tarea, ah…
Y…Como dicen popularmente, para terminar de hacerla, empresarios autobuseros solicitan más tiempo para acondicionar sus unidades y les es concedido, es decir, que los habitantes con capacidades diferentes sigan en espera para poder ejercer plenamente su derecho al transporte.
¿Cómo puede ser posible que… Aún estando conscientes de la realidad del país en este tema, las autoridades competentes no actúan para que la ley se cumpla?, ¿Cómo puede ser que a causa de falta de autoridad para hacer cumplir la ley y a causa de falta de voluntad de los choferes, y en vista de la necesidad de asistir a una cita médica o a una cesión de terapia que por ejemplo es a las 11 de la mañana, una señora, cuya hija es usuaria de silla de ruedas, deba salir de su casa desde las 7 de la mañana, simplemente porque de los taxis con rampa que hay, únicamente un chofer está dispuesto a hacerle el servicio?, ¿cómo puede ser posible que las autoridades se queden de brazos cruzados y no velen porque autobuseros y taxistas brinden el servicio adecuado a personas con capacidades diferentes?, ¿cómo puede ser posible que no se aplican sanciones a quienes se niegan a brindar el servicio?.
Estas son algunas de las interrogantes que surgen a raíz de la problemática planteada en el presente artículo. De una forma muy respetuosa invito a todas las personas y en especial a quienes forman parte de las autoridades a luchar para alcanzar una verdadera igualdad, hagamos cumplir la ley, hagamos nuestro máximo esfuerzo con tal de que los vehículos de transporte público cumplan con las condiciones necesarias para que todos y todas podamos valernos de este servicio y así desplazarnos libremente, no veamos este esfuerzo como algo que beneficia a unos pocos (a quienes andan en silla de ruedas), es un beneficio para todos, una oportunidad para que Costa Rica sobresalga a nivel mundial gracias al respeto a los derechos humanos, es una oportunidad para demostrar que todos somos iguales y merecemos el respeto de nuestros derechos.
Sin embargo, en diversas ocasiones este colectivo ha sido víctima de la violación de uno o varios de sus derechos, violaciones que se hace todo un esfuerzo por erradicarlas, a decir verdad, frenar lo que debe calificarse como discriminación, constituye desafortunadamente una titánica tarea, si, una titánica tarea, debido a la desinformación que padece la sociedad, desinformación que ha llevado a la gente a tener un concepto pesimista respecto a la población con capacidades diferentes, de ahí que erróneamente se consideren las capacidades diferentes o especiales como un obstáculo para salir adelante, es ahí donde nace la discriminación, la cual se transforma en violación a los derechos, mas…
Aunque resulte difícil revertir la situación, no hay razón que justifique el abandono de la lucha en pro de lograr ese objetivo, o al menos si no se logra en un 100%, lograr una notoria mejoría.
En este caso la preocupación es la violación del derecho al transporte, producto de la ausencia de las adaptaciones requeridas en las unidades de las distintas modalidades de transporte público, llámese taxi, auto bus, etc. Resulta contradictorio, incomprensible e inexplicable que: En Costa Rica, existiendo una ley cuyo fin es defender los derechos de quienes presentan capacidades especiales, el transporte público no cumple con las rampas y las demás adaptaciones que se requieren y que , cuando mucho el 1% de taxis y de buses lo cumplen.
Pero esto no es todo, sumado a que tan solo el 1% de vehículos de transporte público cumple con las rampas y el resto de adaptaciones, es ese mismo porcentaje de choferes, el que está dispuesto a brindar el servicio, el resto se dedica a inventar excusas para evadir la tarea, ah…
Y…Como dicen popularmente, para terminar de hacerla, empresarios autobuseros solicitan más tiempo para acondicionar sus unidades y les es concedido, es decir, que los habitantes con capacidades diferentes sigan en espera para poder ejercer plenamente su derecho al transporte.
¿Cómo puede ser posible que… Aún estando conscientes de la realidad del país en este tema, las autoridades competentes no actúan para que la ley se cumpla?, ¿Cómo puede ser que a causa de falta de autoridad para hacer cumplir la ley y a causa de falta de voluntad de los choferes, y en vista de la necesidad de asistir a una cita médica o a una cesión de terapia que por ejemplo es a las 11 de la mañana, una señora, cuya hija es usuaria de silla de ruedas, deba salir de su casa desde las 7 de la mañana, simplemente porque de los taxis con rampa que hay, únicamente un chofer está dispuesto a hacerle el servicio?, ¿cómo puede ser posible que las autoridades se queden de brazos cruzados y no velen porque autobuseros y taxistas brinden el servicio adecuado a personas con capacidades diferentes?, ¿cómo puede ser posible que no se aplican sanciones a quienes se niegan a brindar el servicio?.
Estas son algunas de las interrogantes que surgen a raíz de la problemática planteada en el presente artículo. De una forma muy respetuosa invito a todas las personas y en especial a quienes forman parte de las autoridades a luchar para alcanzar una verdadera igualdad, hagamos cumplir la ley, hagamos nuestro máximo esfuerzo con tal de que los vehículos de transporte público cumplan con las condiciones necesarias para que todos y todas podamos valernos de este servicio y así desplazarnos libremente, no veamos este esfuerzo como algo que beneficia a unos pocos (a quienes andan en silla de ruedas), es un beneficio para todos, una oportunidad para que Costa Rica sobresalga a nivel mundial gracias al respeto a los derechos humanos, es una oportunidad para demostrar que todos somos iguales y merecemos el respeto de nuestros derechos.
Buenos días. Quiero hacer referencia al comentario anterior, ya que la discusión sobre la defensa de los derechos de cada una de las partes de los habitantes de Costa Rica tiene una gran importancia desde el punto de vista de desarrollo, no solo de esquemas de pensamiento, sino de desarrollo urbano.
La adaptación de los autobuses, no solo en rampas, sino en el resto de sus partes, como la altura de los timbres, la eliminación de los antiguos trompos, los pisos antideslizantes, son hoy en día una realidad, y están supervisados por las normas de Riteve y por el Consejo de Transporte Público.
Hoy en día, la mitad de los autobuses en el país, tienen rampas, y para el 2014, toda la flota debe cumplir con esa adaptación.
No obstante todo ello, quiero referirme a un tema adicional, pero no menos importante que las rampas.
Nuestro país debe ordenarse más allá del discurso político, y debe haber acuerdos, tutelados por la sociedad civil, para reparar las aceras, para que las paradas de transporte público tengan las condiciones de acoger a las personas que llegan en silla de ruedas. Los caños deben ser adaptados en las paradas, y el acceso a una rampa tiene condiciones que hoy no se cumplen. El Gobierno Central y los gobiernos locales deben tomar decisiones, y la sociedad civil debe exigirles plazos, para garantizar una verdadera accesibilidad total, y efectivamente formar parte así, de un mundo más inclusivo.
Luis Diego González
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